RETO 1.
Hace apenas unos días todos los trabajadores de la Agencia Tributaria (AEAT) recibimos una serie de correos electrónicos enviados por varios sindicatos con representación en nuestro organismo (UGT, CCOO, SIAT).
Para presentar a dicho organismo, debemos destacar que la Agencia Tributaria cuenta con una Comisión de Igualdad, que de acuerdo con su Reglamento interno, debe reunirse trimestralmente.
No obstante, de acuerdo con las noticias difundidas por dichos sindicatos, la Dirección de la AEAT está incumpliendo dicho Reglamento no procediendo a reunir a la Comisión las cuatro veces al año establecidas, sino que su funcionamiento se basa exclusivamente en la realización de una reunión anual donde se exponen diversos datos estadísticos pero no se negocia ni se atienden a las propuestas de los trabajadores y trabajadoras de la AEAT.
Las principales desigualdades que se evidencian en estas noticias se observan en los datos estadísticos previamente mencionados. Estos son:
- Mayor proporción de mujeres funcionarias en los subgrupos más bajos, especialmente dentro del personal contratado para Campaña de Renta, mayoritariamente fijo discontinuo, que son los que perciben menores ingresos anuales. En este último caso, hay un 64,02% de mujeres frente a 35,98% de hombres.
- En los puestos de niveles altos de funcionarios de carrera (grupo A1 y niveles 26, 27, 28, 29 y 30) sigue habiendo más presencia de hombre que de mujeres con un porcentaje del 63% de hombres y 37% de mujeres.
- Dos de cada tres permisos de conciliación son disfrutados por mujeres, a pesar de los permisos existentes en igualdad de condiciones para los hombres (efectos retributivos de de promoción).
- En cuanto a las retribuciones económicas, denuncian que sigue existiendo la brecha salarial entre hombres y mujeres. Actualmente las estadísticas solo recogen las retribuciones básicas sin tener en cuenta las complementarias, las cuales son más elevadas en hombres que en mujeres.
El origen de las desigualdades de género expuestas, se encuentran muy relacionadas con la socialización diferencial de niñas y niños.
En cuanto a la proporción de hombres y mujeres que componen la AEAT, existe claramente una jerarquía bien diferenciada en la que los hombres acceden a puestos de mayor responsabilidad y poder y por tanto, mejor remunerados. A estos puestos ocupados tradicionalmente por hombres, se les atribuye mayor valor, creando así esos roles en los que los hombres desempeñan cargos de mayor responsabilidad y las mujeres son sus subordinadas, pasando a trabajar para ellos. Esta imagen cumple con el estereotipo en el que el hombre domina y la mujer queda subordinada a él, y una vez más, es lo que se cumple y lo que seguimos transmitiendo consciente o inconscientemente a las nuevas generaciones.
De una manera más intensa, considero que transmitimos a los niños y niñas la socialización de género cuando hablamos de que la mayor parte de permisos de conciliación son disfrutados por mujeres. Que estereotipo transmitimos al niño o niña cuya mamá disfruta de una excedencia o una reducción de jornada para cuidar de él mientras papá trabaja fuera de casa y trae el dinero a casa? Esta cuestión me hace plantearme hasta que punto podemos decir que se "disfruta" de un permiso cuando más bien podría tratarse de una obligación familiar implícita en el rol de la mujer, un trabajo no remunerado y no compartido con el hombre.
Como estrategia para acabar con estas desigualdades de género detectadas, por ejemplo, en el caso de los permisos de conciliación se me ocurren dos medidas a aplicar:
Una en el corto plazo, que consistiría en implantar permisos de conciliación de obligatorio cumplimiento para los dos progenitores como ocurre con los permisos de paternidad y maternidad, ambos de igual duración y a disfrutar por ambos progenitores, sin posibilidad de que puedan elegir si el padre o la madre hace uso de él. Es decir, ante un mismo sujeto, el hijo o hija, si los progenitores eligen disfrutar de una excedencia por cuidado de hijos, cada uno debe hacer uso del mismo por la mitad del tiempo que dure la excedencia.
En el largo plazo, la mejor solución considero que es la educación, por ejemplo, través de encuentros educativos en los colegios en los que mostremos cargos públicos de mayor responsabilidad en la Administración pública encabezados por mujeres, incentivando a que el padre y la madre se repartan las tareas relacionadas con la educación de sus hijos (recoger del colegio, ayuda con los deberes, etc.) para minorar la percepción de los estereotipos de género en los niños y niñas.
Comentarios
Publicar un comentario